Aunque aun su origen es incierto, la tapa se ha convertido en el elemento más característico de la gastronomía española por dentro y fuera de sus fronteras.
Muchos aseguran que fue cuando el rey Alfonso XIII antes de regresar a su palacio en Cádiz se detuvo en el Ventorillo del Chato y pidió una copa de vino de Jerez cuando un remolino de viento entró en el local y un camarero para evitar la arena se precipitó a cubrir su copa con una loncha de jamón, así que cuando el rey preguntó qué era eso el mozo le contestó que era una ‘tapa’ para que no le entrara arena a la copa. Al rey le fascinó la idea y no dudo en repetir otra copa con su ‘tapa’.
Esas pequeñas cantidades de comida no se limitan sólo a las aceitunas o a las patatas fritas sino que también existen todo tipo de tapas frías y calientes como las que te ofrecemos en Jurucha Bar de Tapas.
Hoy en día esta tradición en Jurucha Bar de Tapas sigue muy vigente. Acompañada de cerveza, vino o refresco la “tapa” es ideal para pasar un rato agradable y desconectar de la rutina.
¿Conocíais esta historia sobre 'las tapas'?